Descubriendo los entresijos y curiosidades de La Rioja
Descubriendo los entresijos y curiosidades de La Rioja
¡Saludos, viajeros! Si estáis listo para explorar más allá de las viñas y descubrir algunas rarezas de La Rioja, estás en el lugar correcto. Aquí te contaremos más de cinco cosas que quizás no sabías sobre esta región española. Así que, sin más preámbulos, ¡vamos a ello!
1. Paseo del Espolón
Visitar el paseo del Espolón no es solo un lugar para pasear, ¡es un testigo del pasado! Antiguamente llamado Paseo Príncipe de Vergara, albergaba estatuas reales que llegaron directo del Palacio Real de Madrid. Aunque las estatuas desaparecieron, el general Espartero se quedó plantado allí. Ah, y ¿sabías que en 1610, Logroño fue el escenario del último Auto de Fe de la Santa Inquisición? ¡Casi nada!
2. Plaza de Santiago
En la Plaza de Santiago, el suelo te cuenta una historia distinta: ¡la del Juego de la Oca! Se rumorea que este empedrado es un guiño a los templarios, conectando el Camino Francés de peregrinaje a Santiago de Compostela con el juego de mesa. Una conexión entre la historia y el entretenimiento que te hace preguntarte si los templarios también eran fanáticos de los dados.
3. Jornadas Medievales en Briones
¿Te gustaría dar un salto al siglo XIV? Cada tercer fin de semana de junio, Briones se transforma en una aldea medieval. Músicos, bufones y hasta los locales se visten como si el tiempo se hubiera detenido. Doncellas, caballeros, y un ambiente que te hace pensar si has viajado en el tiempo o si simplemente estás en una película de época.
4. Monasterio de Veruela
El Real Monasterio de Santa María de Veruela, un monumento arquitectónico cisterciense del siglo XII, es el más antiguo de Aragón. Aunque no está ubicado en La Rioja, está a menos de una hora de Alfaro.
A lo largo de los siglos, el monasterio experimentó diversas etapas de construcción, destacando la finalización de la iglesia en el siglo XVII y la construcción de un nuevo claustro barroco. Sin embargo, la desamortización de 1835 obligó a los monjes a abandonar el lugar, resultando en la pérdida de muchos de sus bienes. A pesar de ello, la creación de una hospedería y el esfuerzo de una junta de conservación contribuyeron a preservar el monumento.
Durante la segunda mitad del siglo XIX, Veruela atrajo a la alta sociedad zaragozana y a prominentes figuras como los hermanos Bécquer, quienes encontraron en este lugar romántico inspiración para sus obras. La presencia del poeta Gustavo Adolfo Bécquer ha otorgado a Veruela una universalidad que perdura hasta hoy. En 1976, el Estado cedió el usufructo del monasterio a la Diputación Provincial de Zaragoza, que desde entonces ha trabajado en su restauración y lo mantiene abierto al público, convirtiéndolo en un espacio cultural para exposiciones, cursos y festivales musicales.
5. El Misterio de los Champiñones en Pradejón
En 1915, tres habitantes de Pradejón fueron a Francia en busca del 'Dorado' de los champiñones. ¿Éxito? No tanto. Pero en 1954, José Luis Merino y su pandilla lo volvieron a intentar en bodegas locales. Y adivina qué, ¡funcionó! Aunque con algunas idas y venidas, la determinación llevó a la construcción de los primeros caños de champiñón. ¡Un cuento que huele a triunfo!
6. Tarazona
Tarazona destaca por su Catedral de Santa María de Huerta, una maravilla gótica, mudéjar y renacentista. La plaza de toros octogonal del siglo XVIII es única en España, y la fachada renacentista del Ayuntamiento merece atención.
Caminar por el casco histórico revela casas colgadas sobre el río Queiles, la iglesia de Santa María Magdalena y el convento de la Concepción. La ciudad cuenta con un antiguo barrio judío y morisco que testimonia la rica convivencia cultural.
7. Vinos riojanos y como usarlos al cocinar
Maridar el vino de Rioja con la comida es un arte que mejora la experiencia culinaria. Aquí hay algunas recomendaciones clave:
1. Tiempo de crianza: Considera el tiempo de crianza del vino. Los vinos de crianza son más suaves y frutales, mientras que los de reserva y gran reserva son más ahumados y potentes. Combínalos con platos que equilibren su intensidad.
2. Sabores similares: El vino de Rioja con notas de frutos del bosque, especias y toque ahumado se complementa bien con platos que compartan estos sabores. Carne a la parrilla, guisos con especias y salsas de frutos del bosque son excelentes opciones.
3. Equilibrio de sabores: Busca un equilibrio entre el vino y el plato. Un vino más potente va bien con sabores fuertes, como carnes a la parrilla, mientras que un vino más suave se complementa con sabores más ligeros, como pescado al horno.
Y ahí lo tienes, siete razones más para enamorarte de La Rioja. Si quieres seguir descubriendo secretos y vivir estas experiencias, te invitamos a reservar tu estancia en el Hotel Palacios Rioja. ¡Que comience la aventura, exploradores!
1. Paseo del Espolón
Visitar el paseo del Espolón no es solo un lugar para pasear, ¡es un testigo del pasado! Antiguamente llamado Paseo Príncipe de Vergara, albergaba estatuas reales que llegaron directo del Palacio Real de Madrid. Aunque las estatuas desaparecieron, el general Espartero se quedó plantado allí. Ah, y ¿sabías que en 1610, Logroño fue el escenario del último Auto de Fe de la Santa Inquisición? ¡Casi nada!
2. Plaza de Santiago
En la Plaza de Santiago, el suelo te cuenta una historia distinta: ¡la del Juego de la Oca! Se rumorea que este empedrado es un guiño a los templarios, conectando el Camino Francés de peregrinaje a Santiago de Compostela con el juego de mesa. Una conexión entre la historia y el entretenimiento que te hace preguntarte si los templarios también eran fanáticos de los dados.
3. Jornadas Medievales en Briones
¿Te gustaría dar un salto al siglo XIV? Cada tercer fin de semana de junio, Briones se transforma en una aldea medieval. Músicos, bufones y hasta los locales se visten como si el tiempo se hubiera detenido. Doncellas, caballeros, y un ambiente que te hace pensar si has viajado en el tiempo o si simplemente estás en una película de época.
4. Monasterio de Veruela
El Real Monasterio de Santa María de Veruela, un monumento arquitectónico cisterciense del siglo XII, es el más antiguo de Aragón. Aunque no está ubicado en La Rioja, está a menos de una hora de Alfaro.
A lo largo de los siglos, el monasterio experimentó diversas etapas de construcción, destacando la finalización de la iglesia en el siglo XVII y la construcción de un nuevo claustro barroco. Sin embargo, la desamortización de 1835 obligó a los monjes a abandonar el lugar, resultando en la pérdida de muchos de sus bienes. A pesar de ello, la creación de una hospedería y el esfuerzo de una junta de conservación contribuyeron a preservar el monumento.
Durante la segunda mitad del siglo XIX, Veruela atrajo a la alta sociedad zaragozana y a prominentes figuras como los hermanos Bécquer, quienes encontraron en este lugar romántico inspiración para sus obras. La presencia del poeta Gustavo Adolfo Bécquer ha otorgado a Veruela una universalidad que perdura hasta hoy. En 1976, el Estado cedió el usufructo del monasterio a la Diputación Provincial de Zaragoza, que desde entonces ha trabajado en su restauración y lo mantiene abierto al público, convirtiéndolo en un espacio cultural para exposiciones, cursos y festivales musicales.
5. El Misterio de los Champiñones en Pradejón
En 1915, tres habitantes de Pradejón fueron a Francia en busca del 'Dorado' de los champiñones. ¿Éxito? No tanto. Pero en 1954, José Luis Merino y su pandilla lo volvieron a intentar en bodegas locales. Y adivina qué, ¡funcionó! Aunque con algunas idas y venidas, la determinación llevó a la construcción de los primeros caños de champiñón. ¡Un cuento que huele a triunfo!
6. Tarazona
Tarazona destaca por su Catedral de Santa María de Huerta, una maravilla gótica, mudéjar y renacentista. La plaza de toros octogonal del siglo XVIII es única en España, y la fachada renacentista del Ayuntamiento merece atención.
Caminar por el casco histórico revela casas colgadas sobre el río Queiles, la iglesia de Santa María Magdalena y el convento de la Concepción. La ciudad cuenta con un antiguo barrio judío y morisco que testimonia la rica convivencia cultural.
7. Vinos riojanos y como usarlos al cocinar
Maridar el vino de Rioja con la comida es un arte que mejora la experiencia culinaria. Aquí hay algunas recomendaciones clave:
1. Tiempo de crianza: Considera el tiempo de crianza del vino. Los vinos de crianza son más suaves y frutales, mientras que los de reserva y gran reserva son más ahumados y potentes. Combínalos con platos que equilibren su intensidad.
2. Sabores similares: El vino de Rioja con notas de frutos del bosque, especias y toque ahumado se complementa bien con platos que compartan estos sabores. Carne a la parrilla, guisos con especias y salsas de frutos del bosque son excelentes opciones.
3. Equilibrio de sabores: Busca un equilibrio entre el vino y el plato. Un vino más potente va bien con sabores fuertes, como carnes a la parrilla, mientras que un vino más suave se complementa con sabores más ligeros, como pescado al horno.
Y ahí lo tienes, siete razones más para enamorarte de La Rioja. Si quieres seguir descubriendo secretos y vivir estas experiencias, te invitamos a reservar tu estancia en el Hotel Palacios Rioja. ¡Que comience la aventura, exploradores!